http://twitter.com/gpswami
ISKCON no es simplemente una institución, como algunos pudiéramos pensar. Es una sociedad trascendental, creada por Śrīla Prabhupāda para proveer los aspectos más esenciales de la vida espiritual: la asociación con devotos, el canto de los santos nombres, escuchar —especialmente el Śrīmad-Bhāgavatam—, vivir en un lugar santo y realizar adoración.
Sin duda ha habido ocasiones, tanto en el pasado como en el presente, en las que no hemos tenido la oportunidad de vivir y adquirir las metas e ideales que él promovió. Para mí, eso le da más gloria a ISKCON, puesto que implica retos sin los cuales nuestras vidas se volverían torpes, tediosas, rutinarias y monótonas. Al principio, después de la partida de Śrīla Prabhupāda y de recuperarnos del golpe que ello significó, pensamos que sería fácil mantener la prédica, los templos, etc. No entendíamos entonces que su presencia era el ingrediente principal para esa aparente facilidad. Ahora que las circunstancias nos han requerido la urgente necesidad de colocar a Śrīla Prabhupāda completamente en el centro, esa facilidad que alguna vez conocimos y sentimos, es de nueva cuenta, una posibilidad.
Por lo tanto, ISKCON sólo puede triunfar en la medida que incluyamos a Śrīla Prabhupāda. Humildemente exhorto a aquellos que están leyendo estas palabras a que reflexionen cómo lograr que la presencia de Śrīla Prabhupāda, tanto en sus enseñanzas como en su inspiración, sea el aspecto más importante de sus vidas.
Quiero presentar a Śrīla Prabhupāda desde el punto de vista de su misión, no históricamente. Confío en ir haciendo observaciones sobre él. Si los devotos pueden comenzar a penetrar en las profundidades de la visión de Śrīla Prabhupāda, entonces nuestra vida espiritual cobrará una dimensión dinámica en lugar de mantenernos como seguidores pasivos.
Śrīla Prabhupāda es una mina de cualidades trascendentales. En el Śrīmad-Bhāgavatam (3.25.21), Kapiladeva describe al sādhu de la siguiente manera:
titikṣavaḥ kāruṇikāḥ
suhṛdaḥ sarva-dehinām
ajāta-śatravaḥ śāntāḥ
sādhavaḥ sādhu-bhūṣaṇāḥ
Los síntomas de un sādhu son la tolerancia, la misericordia y la amistad hacia todas las entidades vivientes. No tiene enemigos, es pacífico, acepta sin objeción las escrituras y todas sus características son sublimes.
Sādhu-bhūṣaṇāḥ, el devoto está lleno de cualidades. Y Śrīla Prabhupāda es un sādhu-bhūṣaṇāḥ śiromāṇī, el devoto más elevado. De entre todas sus sublimes características, encuentro que su trato de guru-niṣṭha es lo que lo distinguió de sus contemporáneos y de sus hermanos espirituales. Él escribió en una carta que, después de haber aceptado sannyāsa: «Estaba escribiendo libros, no muy ocupado en abrir templos o reclutando neófitos, como mis hermanos espirituales. Mi Guru Mahārāja me dijo que de alguna manera u otra distribuyera libros».
Él demostró la perfección de la simplicidad al colocar las instrucciones de su guru como lo determinante en cada decisión. Hábilmente combinó esa pureza con yukta-vairāgya; la habilidad de hacer y utilizar cualquier cosa para el placer de Kṛṣṇa. Nadie se sintió explotado o utilizado, ya que fue muy obvio que todo viene de Kṛṣṇa, y todo se ofrece de regreso a Él.
Śrīla Prabhupāda comenta que el deber de un ācārya es esparcir el mensaje trascendental del Santo Nombre, no el de rodearse de neófitos. Él advirtió a sus hermanos espirituales en su ofrenda, llamada Vaiśiṣtyāṣṭakaṁ, de que la verdadera vida espiritual y el deseo específico de Śrīla Bhaktisiddāntha Sarasvatī Ṭhākura era el de predicar, no tocar campanas o tener festivales de frutas y flores proclamarse como un firme seguidor, o el estar complacido con un pequeño grupo de seguidores.
Podemos leer, tanto en sus cartas como en sus libros, que Śrīla Prabhupāda recomienda la prédica por encima de otras actividades devocionales. Lo anterior no es para restar méritos a dichas actividades devocionales, sino para remarcar la visión única de Su Santidad, la cual lo impulsó hasta colocarlo como el más distinguido y conocido vaiṣṇava en la historia mundial. Es nuestro deber y gracia salvadora abrazar su visión de prédica, conservándola intacta como la fuerza conducente de la Conciencia de Kṛṣṇa.
Si tratamos de entender a Śrīla Prabhupāda desde un punto de vista interno, nuestra determinación aumentará, nuestro deseo de amar a Kṛṣṇa crecerá y nuestro anhelo por complacerlo nos llevará más allá de cualquier obstáculo. La interior no es una percepción misteriosa o esotérica, sino simplemente la comprensión de la actitud esencial de devoción que motiva al devoto puro a servir desinteresadamente, por la cual recibe placer ilimitado, incluso sin buscarlo.
Les pido a todos los discípulos, y a aquellos a quienes estas palabras inspiren, a sumergirse profundamente en el océano de misericordia y conocimiento espiritual que Śrīla Prabhupāda ha dejado para nosotros. Yo les puedo garantizar que si lo hacen, no habrá disminución alguna en su vida y sólo querrán tener tiempo suficiente para profundizar más y más.
Copyright © 2008-2024 Guru Prasad Swami.
